La secretaria de Estado lamentó la postura de un sector docente que resolvió retirarse de la mesa de diálogo, ante la imposibilidad de obtener un incremento salarial del 10%. Según Marta Lafuente, este pedido representará una sobrecarga del 11% en el Presupuesto General de Gastos de la Nación, lo que calificó de intolerable.
“Los servicios no pueden ser suspendidos por ningún motivo y los maestros tienen que garantizar este servicio. Los días que no se trabajan son días que no se pagan. No puedo abandonar una mesa porque no me dan lo que pido, cuando necesitamos de un pacto social y un trabajo sostenido para preservar la educación como un bien público” recalcó.
Aclaró además que hasta el momento solo la Unión de Educadores del Paraguay (UNE) ha notificado al Gobierno que irá a una huelga y que haya sido el gremio que se retiró de la tripartita. Es por ello que prometió trabajar por un aumento gradual del presupuesto para la educación, por lo menos hasta un 6%; no obstante, insistió en que los alumnos merecen desarrollar un segundo semestre, especialmente aquellos 12.000 estudiantes que se vieron obligados a desplazarse y tuvieron que abandonar sus hogares y escuelas a causa de inundaciones.
El reclamo principal de los gremios es el aumento salarial del 10% para todos los trabajadores de la educación, mientras que el Ministerio de Educación y Cultura (MEC) plantea un reajuste salarial solo para aquellos que actualmente perciben menos del mínimo vigente. El reajuste del salario mínimo implica un aumento del presupuesto de US$ 45 millones y llegaría a unos 40.000 funcionarios. Para lograr un reajuste al salario de todos, se necesitarían unos US$ 27 millones más, según cálculos de los gremios. Estos recursos actualmente no están disponibles, según el MEC.
Abc
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