La menor de 10 años tiene 21 semanas de gestación. Foto ilustrativa (web).
“Externamente uno la mira”, relata el doctor, “…y no están desarrollados los caracteres de una mujer, es una niña con la panza”, prosigue.
Sorpresivo fue para la madre de la niña enterarse el lunes en la tarde de que la presunción de un tumor, que le habían indicado los médicos, terminó siendo un embarazo de unas 21 semanas. En realidad, la sorpresa fue de todos. “Hace dos años tuvimos un caso de una niña de 12 años que resultó que estaba embarazada, pero de esta edad nunca vimos un caso”, señala el doctor.
Con el cuidado que requiere, la psicóloga atendió a la niña. “No emite ninguna versión de cómo ocurrieron los hechos”, señaló el doctor Oviedo en 1080 AM. No responde a ninguna consulta al respecto. “El primer comportamiento del abuso es la negación y el aislamiento, según los profesionales, pero no podría adelantar que esto sea un caso de abuso o cómo ocurrieron los hechos”, abundó.
En cuanto al feto en el interior de la niña de 10 años, Oviedo adelantó que se encuentra “en óptimas condiciones”. Sin embargo, advierte que las complicaciones se irían dando mientras el bebé crece. A la edad que tiene la pequeña futura mamá, todavía no está completamente desarrollado el útero, explica.
Este tipo de embarazos, ocasiona que el niño nazca de forma prematura, indicó.
La mamá de la menor no vive con el padre de la menor, sale temprano rumbo a su trabajo de limpiadora en una institución pública, y deja a los niños a cargo de la tía, comentó el doctor Oviedo.
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