La operación inició el pasado 8 de marzo en el departamento de Amambay. Para el , un contingente de la SENAD, la Fuerza de Tarea Conjunta y el Ministerio Público se trasladó hasta dicha zona, donde lograron eliminar grandes superficies de cultivos ilícitos y anularon varios centros de acopio.
GENTILEZA.La tarea contó con el importante apoyo de la Policía Federal del Brasil.
A lo largo de los días, el personal operativo logró erradicar un total de 257 hectáreas de cultivo de marihuana, distribuidas en 102 parcelas.
Las plantaciones se encontraban en gran medida prestas para la cosecha. De no haber sido destruidas, dejarían una producción final de al menos 771 toneladas de la hierba ilegal.
GENTILEZA.
Así también, mediante el patrullaje de los equipos antidrogas, fueron detectados e incinerados unos 73 campamentos de los marihuaneros.
En el interior de los mismos ya se encontraban acopiados 16.330 kilos de marihuana picada, así como 180 kilos de semillas de cannabis y 7 prensas rústicas.
Trabajos operativos
Previamente a la operación la SENAD realizó sobrevuelos de reconocimiento que permitieron identificar las zonas de cultivos de cannabis de mayor concentración.
Las mismas estaban ubicadas en localidades como Pacola y Alpasa (zonas de influencias de conocidas bandas criminales del norte) así como en Chiriguelo y María Auxiliadora, jurisdicción de Pedro Juan Caballero.
Posteriormente, desde el pasado 8 de marzo, con apoyo de helicópteros de la Armada Nacional se iniciaron las incursiones dentro de las extensas zonas boscosas utilizadas para el cultivo de marihuana.
Las tareas estuvieron acompañadas permanentemente por el fiscal antidroga del departamento de Amambay Abg. Hugo Volpe.
El principal mercado de consumo de la marihuana producida en estas zonas es el Brasil, razón por la cual la Policía Federal de dicho país, en el marco de la responsabilidad compartida, apoya fuertemente este tipo de operaciones que afectan en mayor medida las finanzas de las estructuras criminales.
Existe una coyuntura regional favorable para replicar este método de acciones conjuntas con otros países de Sudamérica como Argentina, que también es receptor de grandes cargas de cannabis provenientes de nuestro país.
Previamente a la operación la SENAD realizó sobrevuelos de reconocimiento que permitieron identificar las zonas de cultivos de cannabis de mayor concentración.
Las mismas estaban ubicadas en localidades como Pacola y Alpasa (zonas de influencias de conocidas bandas criminales del norte) así como en Chiriguelo y María Auxiliadora, jurisdicción de Pedro Juan Caballero.
Posteriormente, desde el pasado 8 de marzo, con apoyo de helicópteros de la Armada Nacional se iniciaron las incursiones dentro de las extensas zonas boscosas utilizadas para el cultivo de marihuana.
GENTILEZA.
Las tareas estuvieron acompañadas permanentemente por el fiscal antidroga del departamento de Amambay Abg. Hugo Volpe.
El principal mercado de consumo de la marihuana producida en estas zonas es el Brasil, razón por la cual la Policía Federal de dicho país, en el marco de la responsabilidad compartida, apoya fuertemente este tipo de operaciones que afectan en mayor medida las finanzas de las estructuras criminales.
Existe una coyuntura regional favorable para replicar este método de acciones conjuntas con otros países de Sudamérica como Argentina, que también es receptor de grandes cargas de cannabis provenientes de nuestro país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario