LUQUE.- Una mujer, quien se desempeñaba como empleada doméstica en la casa del afectado, dijo que escuchó ruidos extraños en una de las habitaciones, por lo que entró a verificar encontrando al sujeto encima del menor, acostado en la cama. Al percatarse de que había sido descubierto, rápidamente se vistió y abandonó la residencia, sin dar explicaciones sobre su comportamiento.
La trabajadora asistió al pequeño, y por el estado de shock, no quiso comentar nada de lo que vio, pero luego terminó confesando los detalles, ante la comisaría del barrio Laurelty, cuyos agentes procedieron rápidamente a buscar al agresor, pero no encontraron ni rastros.
La madre del de la víctima radicó la denuncia contra su pareja y comentó que desde hace aproximadamente un año viven en la misma casa. Añadió que nunca antes sospechó de lo que sucedía mientras ella no se encontraba en la casa.
La niñera también sostuvo que no se percató hasta el lunes último, en horas de la tarde. La acción formal fue planteada recién al día siguiente, después de que la trabajadora decidiera hablar acerca de lo que vio.
Según datos, el pequeño estaba enfermo y por tal motivo se había quedado en cama, situación que aprovechó el padrastro para cometer el ilícito. El nene se encontraba en total estado de shock, por lo que le trasladaron hasta un centro asistencial.
La Fiscalía dispuso que sea escuchado por sicólogos, a fin de determinar si hubo otros actos anteriores al último caso. Sobre el indiciado ya pesa una orden captura, a fin de que se someta al proceso abierto por el Ministerio Público.
ADN
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