El estudio, cuyos datos revelan daños alarmantes en la salud de niños que crecen en zonas de fumigación de sojales con agroquímicos, se realizaron en 43 niños rodeados por plantaciones de soja, en la localidad de San Juan, departamento de Canindeyú.
El mismo señala que el daño al material genético de los niños puede ocasionar mutaciones celulares que acarrean consigo enfermedades como el Parkinson, diabetes y cáncer. Además los daños pueden transferirse a generaciones futuras provocando malformaciones y abortos espontáneos.
Sonia Acevedo, pobladora de la zona, quien participó de la presentación de la investigación en la UCA, manifestó que con el creciente cultivo de soja llegaron enfermedades que antes no padecían los pobladores de esa zona del país.
Según comentó, durante la fumigación de los cultivos, los pobladores presentan dolencias como dolores de cabeza, vómitos y diarrea. Además, las mujeres embarazadas suelen presentar problemas en la gestación hasta incluso abortos espontáneos, y las criaturas que logran nacer presentan problemas como asma u otras afecciones.
Lamenta además que los agroquímicos utilizados para la fumigación dañen las plantaciones de consumo familiar como las frutas y verduras de las chacras familiares. Denuncia que ante la queja, las autoridades hacen caso omiso y se ponen en contra de los denunciantes.
Dicha investigación constató que en los cultivos de soja se utilizan insecticidas, herbicidas y pesticidas prohibidas en muchos países del mundo, según publica el diario Última Hora.
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