Un episodio de violencia familiar del que supuestamente resultaba víctima de manera frecuente un menor de 8 años mereció la intervención de los vecinos. En la víspera el padre que estaba ebrio estaba golpeando al niño, por lo que fueron a rescatar al menor y luego de reducir al presunto agresor lo entregaron a la policía.
El caso se registró en el asentamiento Nueva Conquista, en el municipio de Hernandarias, cuando los vecinos escucharon nuevamente como el niño de 8 años lloraba y era agredido a golpes por su padre, un hombre de 40 años con quien vivía en el lugar. Como no era la primera vez que el menor sufría violencia, un vecino reportó el hecho ante la comisaría jurisdiccional, pero ante la gravedad de la situación resolvieron ingresar a la casa y rescatar al niño que estaba con visibles marcas en el rostro y la cabeza producto de las agresiones sufridas.
El hombre intentó huir, no tuvieron mejor idea que atarlo con una soga. Lo inmovilizaron de pies y manos a la espera de la llegada de los uniformados, quienes realizaron la intervención comunicando al Ministerio Público sobre lo ocurrido. El mismo quedó detenido y derivado a la sede policial, mientras que el menor fue llevado hasta el hospital distrital para el diagnóstico correspondiente y recibir los cuidados necesarios.
Se constató que presentaba lesiones antiguas y recientes, tenía contusiones en el ojo y la cara que habrían sido producto de golpes de puño. El presunto agresor fue sometido a la prueba de alcoholemia que arrojó 1.396 miligramos de alcohol por litro de sangre, lo que evidencia que estaba totalmente alcoholizado.
En el caso tomo intervención a la Defensoría de la Niñez y se dispuso su permanencia con una familia vecina que aceptó la responsabilidad de la guarda provisoria del pequeño.
Fuente NPY
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