El comisario Carlos Duré manifestó que de la Galería San Miguel se llevaron más de 100 bolsas con teléfonos celulares. Solo en el 2018 hubo más de 16.000 denuncias por la pérdida de estos dispositivos, ya sea en asaltos, hurtos o extravíos.
Duré reconoció cuál es el itinerario de los teléfonos sustraídos. Estos van hasta un técnico que lo cambia por droga o dinero al malviviente, luego modifica el IMEI y reprograma todo para que quede como nuevo el celular o quita todos los accesorios del dispositivo para venderlos por partes.
Ante la ola de este tipo de asaltos, un proyecto que podría desmotivar estos hechos es cargar vía base de datos, toda la información de un dispositivo importado que se borrarán automáticamente cuando un dispositivo sea denunciado como robado o bloqueado por la telefonía.
Posterior a eso, cuando alguien compra el dispositivo, puede acceder a esta plataforma y cotejar los datos que tiene con la lista blanca. Si ninguna información coincide al verificar, se podría presumir que fue ajeno y notificar a las autoridades.
En la noche del lunes se llevó adelante un operativo de incautación de celulares en la Galería San Miguel, un sitio que tiene la mala fama de albergar personas que comercializan celulares robados. Los intervinientes analizarán cada una de las características de los aparatos decomisados con las miles de denuncias que tienen a mano, así como la lista de dispositivos bloqueados otorgados por las telefonías.
Noticiaspy
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