La superioridad del ciclon paraguayo y todo el bagaje internacional del azulgrana pesaron a la hora de inclinar la balanza.
Jorge Rojas, José Ortigoza, Juan Aguilar y William Candia fueron los goleadores de la noche uruguaya. La apertura en el marcador fue de penal a los 21’.
Ese gol se sumaba a la diferencia lograda en Asunción, y para el conjunto sastre la tarea de remontar se volvía desde ya una misión casi imposible.
Boston no jugó como en la ida, a pesar de que pasada la media hora ejerció una presión asfixiante con pelotas cruzadas, pero sin la eficiencia necesaria para encontrar los claros y gatillar.
Cerro liquidó la serie al iniciarse el complemento. José Ortigoza definió de atropellada, estableció el 0-2 parcial y obligaba al rival a marcar cuatro goles para sacar la cabeza a la superficie.
Cerro pasó a jugar como quiso, hasta el punto de anotar más sin siquiera necesitarlo pero sí para dejar patente de su chapa.
El maquillaje a la inapelable goleada llegó a los 78’ con el gol de Federico Rodríguez, que de cierto modo implicó una especie de premio consuelo.
Sol de América se despidió de la Copa Sudamericana luego de cumplir con una muy insuficiente presentación ante Ponte Preta, que con un fútbol discreto pero eficiente se le impuso 1-3 para apropiarse de la serie y avanzar sin inconvenientes a la zona de Octavos de Final.
Jadson y Lucca en dos ocasiones, una de ellas desde los doce pasos fueron los artilleros de la escuadra brasileña, que condicionó la serie con el tanto inicial.
Sol de América es el segundo equipo paraguayo en quedar fuera después de Luqueño. Su rival tuvo oportunismo a la hora de definir, porque en materia de juego no fue vistoso.
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