El subcomisario Juan García, subjefe de Investigación de Delitos del Alto Paraná, se refirió al frustrado robo de película a la empresa Prosegur, en Ciudad del Este. El plan fue descubierto en las primeras horas de ayer, luego de que funcionarios de la firma escucharan una fuerte explosión. Tras recibir el informe, la Policía llegó al lugar y encontró un boquete en una parte del edificio, que anteriormente funcionaba como centro de operaciones de Tesorería y donde se guardaban las bóvedas.
Durante todo el día de ayer se realizaron diligencias hasta que finalmente, en horas de la noche, los intervinientes llegaron hasta una vivienda ubicada a unas cuadras, donde los “topos”iniciaron el trabajo. El subcomisario García mencionó que la estructura tiene una extensión de poco más de 300 metros, desde Prosegur hasta la casa allanada. “Es un trabajo de más de un año que le llevó a esta gente terminar y llegar al predio de la empresa”, refirió.
Según estimó el uniformado, la banda “invirtió” al menos US$ 1 millón en el plan del golpe. “Solo la casa que compraron cuesta US$ 300.000; a eso hay que sumarles las herramientas que compraron, como oxígenos, picos, gatos hidráulicos de gran potencia”, detalló, en contacto con Canal 100. Mencionó, además, que el grupo contaba con equipamiento de alta tecnología y que la infraestructura incluía incluso una “oficina” dentro del túnel. “Era una parte de un túnel que tenía dimensión más grande”, indicó.
“TOPOS”, INGENIEROS Y ARQUITECTOS
El subcomisario García mencionó que el túnel excavado por los asaltantes representa un verdadero trabajo de ingeniería, debido a la precisión y los detalles. “Tuvieron que trabajar ingenieros, por la precisión del túnel, que tuvo la misma profundidad y la misma dimensión en todo el trayecto”, refirió. Mencionó además que se habría contado con mineros, ya que “éstos no eran excavadores de pozos comunes”.
El uniformado estimó que al menos 10 personas estuvieron involucrados en el “trabajo”, que habría sido planeado por el Primer Comando Capital (PCC), de Brasil, aunque también se presume que habrían contado con el apoyo de un grupo paraguayo. Los asaltantes usaban el gato hidráulico para quebrar las piedras que encontraban en el trayecto y sacar la tierra excavada. Una vez retirada la tierra, era cargada en furgones, que aparentaban ser de vendedores de cubiertas usadas. “Había como 150 cubiertas usadas aún (dentro de la vivienda allanada)”, mencionó el subcomisario García.
La Policía manejaba desde hacía tiempo informes de un importante golpe que se preparaba a través de la excavación de un túnel, pero no se sabía del objetivo, por lo que habían alertado a Prosegur, al Banco Central y otras instituciones que manejan grandes caudales.
Abc
Durante todo el día de ayer se realizaron diligencias hasta que finalmente, en horas de la noche, los intervinientes llegaron hasta una vivienda ubicada a unas cuadras, donde los “topos”iniciaron el trabajo. El subcomisario García mencionó que la estructura tiene una extensión de poco más de 300 metros, desde Prosegur hasta la casa allanada. “Es un trabajo de más de un año que le llevó a esta gente terminar y llegar al predio de la empresa”, refirió.
Según estimó el uniformado, la banda “invirtió” al menos US$ 1 millón en el plan del golpe. “Solo la casa que compraron cuesta US$ 300.000; a eso hay que sumarles las herramientas que compraron, como oxígenos, picos, gatos hidráulicos de gran potencia”, detalló, en contacto con Canal 100. Mencionó, además, que el grupo contaba con equipamiento de alta tecnología y que la infraestructura incluía incluso una “oficina” dentro del túnel. “Era una parte de un túnel que tenía dimensión más grande”, indicó.
“TOPOS”, INGENIEROS Y ARQUITECTOS
El subcomisario García mencionó que el túnel excavado por los asaltantes representa un verdadero trabajo de ingeniería, debido a la precisión y los detalles. “Tuvieron que trabajar ingenieros, por la precisión del túnel, que tuvo la misma profundidad y la misma dimensión en todo el trayecto”, refirió. Mencionó además que se habría contado con mineros, ya que “éstos no eran excavadores de pozos comunes”.
El uniformado estimó que al menos 10 personas estuvieron involucrados en el “trabajo”, que habría sido planeado por el Primer Comando Capital (PCC), de Brasil, aunque también se presume que habrían contado con el apoyo de un grupo paraguayo. Los asaltantes usaban el gato hidráulico para quebrar las piedras que encontraban en el trayecto y sacar la tierra excavada. Una vez retirada la tierra, era cargada en furgones, que aparentaban ser de vendedores de cubiertas usadas. “Había como 150 cubiertas usadas aún (dentro de la vivienda allanada)”, mencionó el subcomisario García.
La Policía manejaba desde hacía tiempo informes de un importante golpe que se preparaba a través de la excavación de un túnel, pero no se sabía del objetivo, por lo que habían alertado a Prosegur, al Banco Central y otras instituciones que manejan grandes caudales.
Abc
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