La tierna imagen se viralizó rápidamente por las redes sociales. | Foto: Facebook/Maria Lopez.
Isabelino Benítez, de 46 años, es el hombre que aparece en la imagen, la mujer a la que sostiene en sus brazos y que se encuentra sentada sobre sus piernas es su madre, Damacia Benítez, de 89 años y quien padece de cáncer.
El hombre tuvo que cargar a su madre porque en el Hospital Nacional del Cáncer no había sillas de rueda disponibles. En ese momento María López, quien también acudía al nosocomio, tomó la fotografía y la alzó en su muro de Facebook.
Rápidamente la conmovedora imagen fue compartida y se viralizó a través de las diferentes redes sociales, muchas personas aplaudieron el gesto maternal del joven y recordaron la importancia de honrar a los padres.
La prensa se comunicó con María Cristina Benítez, una de las hijas de la señora Damacia, quien comentó que su madre se encuentra realizando su tratamiento en dicho hospital hace varios meses, porque desde hace dos años padece de esa enfermedad.
La hija cuenta que su madre es actualmente como una bebé, tienen que vestirla, alimentarla, asearla y cargarla todos los días, ya que a sus 89 años doña Damacia ya no puede valerse por sí sola.
"Ella es como una niña pequeña ahora", dice María Cristina y relata que sus hermanas y ella tuvieron que hacerse cargo de su mamá cuando empezó a enfermarse.
Desde muy joven doña Damacia tuvo que educar sola a sus ocho hijos, porque se separó temprano de su marido; con cinco varones y tres mujeres tuvo que ser mamá y papá, recuerda María Cristina, la menor de las hermanas que actualmente tiene 48 años.
La familia es oriunda del barrio Costa Fleitas, en Aregua, allí viven muy cerca unos de otros, tanto María Cristina, sus hermanos y hermanas, así como su mamá, poseen casas propias, pero doña Damacia fue a vivir con una de sus hijas, Basilia Benítez de 60 años, quien se desempeña como alfarera, por lo que es la única que puede atender a su mamá las 24 horas del día.
Pero no por ello toda la responsabilidad cae en esta última, todos los hermanos comparten el compromiso de cuidar de doña Damacia.
Cada semana la visitan y la atienden con mucho amor y mucha gratitud, "ella no quiere que ningún extraño se acerque y la toque", afirma María Cristina, quien explica que su mamá sigue siendo parte importante de toda su familia y que le deben todo a ella.
UH
El hombre tuvo que cargar a su madre porque en el Hospital Nacional del Cáncer no había sillas de rueda disponibles. En ese momento María López, quien también acudía al nosocomio, tomó la fotografía y la alzó en su muro de Facebook.
Rápidamente la conmovedora imagen fue compartida y se viralizó a través de las diferentes redes sociales, muchas personas aplaudieron el gesto maternal del joven y recordaron la importancia de honrar a los padres.
La prensa se comunicó con María Cristina Benítez, una de las hijas de la señora Damacia, quien comentó que su madre se encuentra realizando su tratamiento en dicho hospital hace varios meses, porque desde hace dos años padece de esa enfermedad.
La hija cuenta que su madre es actualmente como una bebé, tienen que vestirla, alimentarla, asearla y cargarla todos los días, ya que a sus 89 años doña Damacia ya no puede valerse por sí sola.
"Ella es como una niña pequeña ahora", dice María Cristina y relata que sus hermanas y ella tuvieron que hacerse cargo de su mamá cuando empezó a enfermarse.
Desde muy joven doña Damacia tuvo que educar sola a sus ocho hijos, porque se separó temprano de su marido; con cinco varones y tres mujeres tuvo que ser mamá y papá, recuerda María Cristina, la menor de las hermanas que actualmente tiene 48 años.
La familia es oriunda del barrio Costa Fleitas, en Aregua, allí viven muy cerca unos de otros, tanto María Cristina, sus hermanos y hermanas, así como su mamá, poseen casas propias, pero doña Damacia fue a vivir con una de sus hijas, Basilia Benítez de 60 años, quien se desempeña como alfarera, por lo que es la única que puede atender a su mamá las 24 horas del día.
Pero no por ello toda la responsabilidad cae en esta última, todos los hermanos comparten el compromiso de cuidar de doña Damacia.
Cada semana la visitan y la atienden con mucho amor y mucha gratitud, "ella no quiere que ningún extraño se acerque y la toque", afirma María Cristina, quien explica que su mamá sigue siendo parte importante de toda su familia y que le deben todo a ella.
UH
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