El cónsul general de Paraguay en Montevideo, Alcides Albariño, señaló a ABC Cardinal que, si bien no hay informaciones oficiales, datos oficiosos señalan que ya son ocho los detenidos en torno al asesinato de una pareja de paraguayos el pasado sábado en el turístico barrio Solymar, departamento de Canelones.
Por secreto de sumario del proceso aún no se conocen los nombres de los arrestados en relación al caso que -consideran las autoridades- estaría ligado al narcotráfico. Tanto por las características del asesinato (no robaron nada, solamente dispararon desde otro vehículo y se dieron a la fuga), como porque el fallecido, abogado Ramón Agustín Quevedo Arce, tenía antecedentes por tráfico de estupefacientes.
PRIORIDAD ES BIENESTAR DEL NIÑO
El cónsul dijo a la emisora que la investigación del crimen queda ahora mismo en manos de las autoridades uruguayas, mientras que a nivel diplomático, Paraguay se concentra en atender al niño de 7 años, hijo de la pareja que sobrevivió al atentado.
“No estamos abocados a la investigación policial, acá la prioridad es un niño menor de edad, hijo de la pareja de fallecidos; estamos abocados a salvaguardar su salud física y mental. Está en custodia de la cónsul Estela Armoa”, dijo. Físicamente se lo ve bien, pero está consciente de lo que pasó y será evaluado por una psicóloga para conocer su estado de salud mental, comentó el entrevistado. Entretanto, se realizan dichas diligencias y una tía del niño está camino a Uruguay desde Ciudad del Este, donde él vivía con sus padres ahora fallecidos.
EL ASESINATO
El hecho ocurrió a las 00:50 del sábado sobre la avenida Giannattasio del barrio Solymar, departamento de Canelones. Los asesinos realizaron los disparos desde un vehículo en movimiento, según las primeras hipótesis. Quevedo recibió 14 balazos, mientras que su esposa Claudia Rossana Camacho, dos. El niño salió físicamente ileso. Además, en el atentado murió un joven de 16 años que fue atropellado por la camioneta de la pareja de paraguayos cuando el vehículo ya desgobernado subió a la vereda y lo alcanzó.
Abc
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