De los varios viajes que realizó el diputado liberal Carlos Portillo utilizando dinero público, el más llamativo fue el que -según mencionaba un informe de misiones parlamentarias al extranjero- realizó en diciembre pasado cuando supuestamente viajó a Las Vegas, la ciudad reconocida mundialmente por su calidad turística y sus grandes casinos. El documento que consta en la página web de Diputados señala que viajó del 27 de diciembre al 5 de enero; es decir, supuestamente había pasado año nuevo en Estados Unidos.
Para la “expedición”, Portillo recibió un total de G. 19.509.000 en viáticos.
La excusa esgrimida era la de participar en un Curso de Gestión Financiera y Presupuesto Público. Llamativamente, hace tan solo algunas semanas, el político había demostrado públicamente su pobre inglés.
Sin embargo, fuentes oficiales confirmaron a ABC Color este viernes que en realidad Carlos Portillo no realizó el viaje a Norteamérica. El diputado por Alto Paraná llegó apenas media hora antes del despegue del avión en el que debía viajar, cuando normalmente se exige que los pasajeros se presenten con por lo menos dos horas de antelación al embarque.
La última vez que Portillo dejó el país en 2013 fue el 22 de octubre,regresando cuatro días después; el 26 de ese mismo mes.
Portillo volvió a realizar un viaje al exterior recién en marzo de este año. El 25 de ese mes abordó el vuelo 906 de Taca y regresó cinco días después en el vuelo 907 de la misma aerolínea.
Es decir, de acuerdo a las informaciones a las que tuvo acceso ABC Color, Carlos Portillo no realizó el viaje a Las Vegas. Llamativamente, el legislador sí recibió -según el propio informe de la Cámara Baja- el viático que debía utilizar para dicha oportunidad.
Hace algunos días, Portillo fue abordado por medios de comunicación sobre su experiencia en Estados Unidos. Cuando se le preguntó si podía relatar de qué se trató el curso y cuáles fueron los temas tratados, el legislador dijo no acordarse puntualmente de las cuestiones. Nunca dijo que no pudo visitar ese país.
Portillo, quien preside la Comisión de Lucha contra el Narcotráfico de Diputados, dijo que “con tantas cosas que tenemos, no me acuerdo más de todo lo que estoy haciendo todos los días, porque yo soy una persona que trabajo muchísimo”.
Al regreso del supuesto viaje, el diputado Carlos Portillo debería haber rendido cuentas sobre el destino que le dio al dinero que recibió en concepto de viáticos. El legislador tenía un plazo de 15 días para presentar todos los documentos; si no lo hizo, se trataría de un caso de negligencia de su parte y por parte de la Contraloría. En caso de haber presentado documentos falsos, se trataría de la comisión de un delito.
El mismo insistió una y otra vez que quienes estuvieran interesados en conocer los detalles de su viaje podrían acercarse a la Cámara de Diputados para solicitar el informe correspondiente.
Carlos Antonio Portillo Verón se ha convertido en los últimos meses en uno de los hombres más polémicos de la política paraguaya. Saltó a la fama debido a un viaje que realizó en marzo pasado para participar de un congreso de comunicación política en el que se trataron temas como “seducción del electorado” y demás.
Ante las masivas interpelaciones ciudadanas, al político liberal no se le ocurrió mejor forma de responder que recurriendo incluso a la agresión a través de sus mensajes y haciendo gala de sus siete títulos universitarios, de los cuales varios fueron cayendo con el correr de los días cuando las universidades en las que dijo haber estudiado afirmaron o bien que no había terminado la carrera o que en realidad la carrera ni siquiera existía en las citadas casas de estudio.
Con la publicación del informe de las misiones parlamentarias al extranjero, se supo además que Portillo es uno de los diputados más viajeros. Entre julio de 2013 y junio de este año, el hombre realizó seis viajes que representaron más de G. 60 millones en concepto de viáticos.
Abc
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