Abrahán Wiebe, padre de adolescente secuestrado por el EPP. | Foto: captura Telefuturo.
Los familiares de los tres secuestrados por el EPP conversaron este sábado en el programa La Lupa, de Telefuturo. La víctima más reciente es Franz Wiebe, de 17 años, quien fue capturado el 27 de julio pasado, mientras trabajaba en la estancia Sociedad Civil Río Verde, en el departamento de San Pedro.
Su padre, además de rezar para recuperar la libertad del joven, pide ayuda a sus amigos. Hasta el momento no hubo comunicación con los secuestradores, solo se recibió el pedido de rescate mediante una carta enviada por el joven que fue secuestrado junto a Wiebe y posteriormente liberado.
La familia no dispone del dinero exigido como rescate por el EPP, unos USD 700.000, y la comunidad tampoco podrá colaborar pues los colonos tienen deudas por la mala cosecha de los últimos dos años.
"La comunidad no está en condiciones de ayudar, él tendrá que conseguir la plata", dijo Jacob Friesen, administrador del establecimiento atacado el día del secuestro.
La comunidad menonita está dispuesta a ayudar en otros aspectos. Hace una semana, confiados en su fe, realizaron oraciones simultáneas en las cuatro iglesias de la colonia Río Verde, en Santa Rosa del Aguaray.
En representación de los colonos, Friesen dijo que están preocupados y con miedo luego del secuestro.Sin embargo, refirió que se sienten apoyados por la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), considera que el Gobierno hace lo que está a su alcance. "Hasta hoy día estamos conformes con la seguridad", expresó Friesen.
El día del secuestro fueron quemadas maquinarias de la estancia. Los testigos reconocieron a miembros el EPP.
Abc
Su padre, además de rezar para recuperar la libertad del joven, pide ayuda a sus amigos. Hasta el momento no hubo comunicación con los secuestradores, solo se recibió el pedido de rescate mediante una carta enviada por el joven que fue secuestrado junto a Wiebe y posteriormente liberado.
La familia no dispone del dinero exigido como rescate por el EPP, unos USD 700.000, y la comunidad tampoco podrá colaborar pues los colonos tienen deudas por la mala cosecha de los últimos dos años.
"La comunidad no está en condiciones de ayudar, él tendrá que conseguir la plata", dijo Jacob Friesen, administrador del establecimiento atacado el día del secuestro.
La comunidad menonita está dispuesta a ayudar en otros aspectos. Hace una semana, confiados en su fe, realizaron oraciones simultáneas en las cuatro iglesias de la colonia Río Verde, en Santa Rosa del Aguaray.
En representación de los colonos, Friesen dijo que están preocupados y con miedo luego del secuestro.Sin embargo, refirió que se sienten apoyados por la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), considera que el Gobierno hace lo que está a su alcance. "Hasta hoy día estamos conformes con la seguridad", expresó Friesen.
El día del secuestro fueron quemadas maquinarias de la estancia. Los testigos reconocieron a miembros el EPP.
Abc
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