Grito sagrado. Óscar Romero celebra el primer gol de la Selección ante Chile, en el Defensores del Chaco. Para el zurdo esa conquista representó su primera anotación oficial con la Albirroja. Antes había convertido en juego amistoso ante Camerún (201
Llegó el momento. Esta vez la Selección Nacional se exhibe, en esta nueva era de Francisco Arce, fuera de casa. Hay un optimismo fortalecido para el encuentro de esta noche, desde las 19.00, en el estadio Centenario, con Uruguay.
El choque corresponde a la octava fecha de las Eliminatorias Sudamericanas, camino al Mundial de Rusia 2018.
Es un partido entre dos equipos que tienen las mismas características futbolísticas y por lo que se presume que habrá mucho roce, pues es muy conocido que ambos seleccionados apelan mucho a lo físico.
Sin embargo, los argumentos que utilizó la Albirroja en la última presentación son muy convincentes en lo que respecta a lo colectivo.
Mucho optimismo. Es un encuentro diferente, es cierto, pero lo concreto es que Paraguay llega al choque de hoy bien fortalecido y con los ánimos bien cargados. El ambiente de optimismo que existe fue muy notorio en las diferentes actividades que cumplió el plantel como preparativo para este juego entre dos protagonistas con las mismas escuelas.
El objetivo es sumar, como sea, y a eso vino Paraguay a Montevideo. Hay respeto por la Albirroja y eso es bueno, porque los charrúas son conscientes de que se encuentran frente a un adversario que tiene sus virtudes como para hacerle daño.
Arce realiza tres modificaciones, dos de ellas obligadas, porque Gustavo Gómez y Rodrigo Rojas están suspendidos por acumulación de tarjetas amarillas. Al primero lo sustituye Pablo Aguilar y al segundo Ortigoza, quien tendrá mucho trabajo en el medio sector. La otra novedad es la presencia, un poco adelantado, de Ángel Romero, quien ingresa por Santander.
UH
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