El Presupuesto que será administrado por el nuevo Gobierno desde el año entrante contemplará una serie de restricciones en los gastos públicos, tales como el congelamiento de salarios y la aplicación de criterios de austeridad en materia de servicios básicos, teléfonos, compra de combustibles, vestimentas y servicios de cátering.
Esto implica que el nuevo presidente, Mario Abdo Benítez, quien asumirá el 15 de agosto, se encontrará ya con un Presupuesto listo para ser enviado al Congreso y ya no tendrá mucho tiempo (31 de agosto) para hacer ajustes.
Con este panorama, recién en el Presupuesto 2020 el nuevo titular del Ejecutivo tendrá más tiempo para elaborar un presupuesto ajustado a su programa de gobierno.
El Decreto 8837/18, emitido por el Ejecutivo, establece los lineamientos generales para la programación, formulación y presentación de los anteproyectos de presupuestos institucionales que constituirán la base para la elaboración del proyecto de Presupuesto General de la Nación para el ejercicio fiscal 2019.
Entre los puntos más importantes que deberán ser tenidos en cuenta, al momento de priorizar los programas que llevarán adelante el próximo año, se destaca la elaboración de los planes operativos institucionales que deberán considerar los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo (PND) Paraguay 2030 y las acciones, planes y proyectos tendientes a cumplir la meta relacionada con la reducción de la pobreza extrema. Estos planes deberán estar reflejados en el Sistema de Planificación para Resultados de la Secretaría Técnica de Planificación (STP).
El cálculo de los ingresos tributarios y no tributarios se estimará con base en un criterio de prudencia de realización y deberá ser tenido en cuenta el entorno macroeconómico proyectado para el 2018.
El aumento del gasto corriente primario no podrá en ningún caso ser superior al 8% en comparación con el Plan Financiero aprobado para el ejercicio fiscal 2018.
No se preverán incrementos salariales en el 2019 y se avanzará en la implementación y profundización de la matriz salarial, la cual no debe tomarse en ningún caso como una recategorización, aumento salarial, ascenso o promoción.
Se establecen restricciones de programación de servicios personales dentro de los proyectos de inversión pública.
AUSTERIDAD. Se deberán establecer medidas de austeridad y disciplina en el consumo de agua, electricidad, suministros y combustibles, así como en el uso de telefonía fija y celular, servicios de cátering y vestimenta.
Se dará continuidad al modelo de gestión para resultados (GpR), que promueve la integración de elementos gerenciales con procesos administrativos.
Además, los OEE deberán programar el Presupuesto Plurianual 2018-2020, a los efectos de considerar la sostenibilidad de las políticas públicas en el mediano plazo.
Finalmente, los lineamientos establecidos por el Poder Ejecutivo para la elaboración del proyecto de Presupuesto 2019 apuntan a garantizar la continuidad y el fortalecimiento del gasto social orientado a la población más vulnerable, así como al sostenimiento de los niveles de inversión en la infraestructura necesaria para el desarrollo, en un marco de responsabilidad fiscal.
Presupuesto vigente contempla elevados gastos
La Ley 6026/18 que aprueba el Presupuesto General de la Nación (PGN) para este año contempla gastos por G. 73,5 billones (USD 13.207 millones al cambio actual) y considera el aumento salarial del 16% a docentes, 8% para médicos, G. 600.000 para personal de la ANDE y 12% para los funcionarios de la INC.
Estos reajustes representan USD 87 millones por encima del proyecto presentado por el Ejecutivo, lo que genera un desfinanciamiento de USD 40 millones, según el Ministerio de Hacienda. El análisis hecho por el Fisco indica también que el PGN 2018 tiene un déficit que llega al 1,7% del PIB, por encima del 1,5% fijado en la Ley de Responsabilidad Fiscal (LRF).
El PGN 2018, además, contempla una autorización para emitir bonos por USD 602 millones y una estimación de ingresos tributarios de G. 23,1 billones.
Para el año entrante se prevé un congelamiento de los gastos, pero habrá que ver qué decide el Parlamento.
UH
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