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Un ciudadano identificado, en contacto con nuestra redacción, denunció el caso de una menor de edad que es supuestamente alejada de su familia. Refirió que se trata de una niña de 10 años que actualmente está viviendo con su padrastro y la novia de este en la ciudad de Yaguarón.
El denunciante indicó que por culpa de la justicia la madre no puede ver a la niña. Además lamentó que, según contaron los vecinos del hombre, la menor sería presuntamente golpeada.
Comentó que el problema inició cuando la pareja se separó. No obstante, la mujer se quedó a vivir en la casa con su exsuegra y excuñada, mientras que el hombre fue a otro lugar. Posteriormente, siempre conforme a la denuncia, un día la mujer ya no fue recibida en la vivienda.
“Ella nos contó que en uno de esos fines de semana en los que volvía a Yaguarón, su exsuegra y su excuñada le prohibieron la entrada a la casa, no la dejaron ver a sus hijas y la dejaron sin techo”, aseguró el ciudadano.
Agregó que inmediatamente fue a hacer la denuncia a la CODENI para poder retirar a la menor de ese hogar. “Pero al parecer tanto la exsuegra, como la excuñada se presentaron entre los días que la misma trabajaba en Asunción, y la denunciaron por abandono de hogar. Curiosamente, días después de que fue echada de la casa, el padrastro (su marido), quien había abandonado la casa, volvió a esa casa con una nueva pareja”, indicó.
Contó que la desesperación comenzó cuando una maestra pidió que la menor sea “rescatada”, ya que la misma supuestamente era golpeada por su padrastro.
Ante la situación, la madre de la menor fue a tratar de visitarla. “Le llevó yogurth, jugo, entre otros víveres, pero la misma fue recibida a pedradas, le soltaron dos perros y cuando, según cuenta la mama, su hija corrió hacia ella para alcanzarla en el portón, fue estirada de los pelos por su madrastra y la metió a la casa”, agregó.
Finalmente, el ciudadano comentó que lograron entablar una denuncia por la violación de la patria potestad. “Con una orden firmada por un juez, Victor Manuel Vega Gonzalez, la fiscalía debía retirarla a la menor y llevarla a donde su mamá está viviendo. Se hizo la demanda y el viernes 13 de marzo fuimos con una patrullera, y una camioneta de la fiscalía en el que iba el asistente fiscal Juan Espínola”, aseveró.
“Ahí estuvieron como media hora mediando para que esa gente nos dé a la nena, hasta que en un momento, la tiastra le dijo: “Vení mamita, vamos a tu pieza para preparar tus cosas y te vas ya’, y la agarró bruscamente, la llevó hacia el fondo de la casa, tardaron unos cinco minutos, y después volvió llorando y temblando diciendo que no quería irse de esa casa, y la tiastra dijo: ‘No se quiere ir, aparte acaba de vomitar y entre el vómito hay sangre’”, relató.
Indicó que luego el asistente fiscal ordenó que la Policía abandone el lugar, y dijo que debido al vomito la niña no podía ser retirada. “Pudimos acceder al acta final de rescate fallido, donde Espínola solo escribió: ‘La niña se encuentra en excelente estado de salud y se suspendió el rescate debido a que la misma lloraba y estaba exaltaba por no querer abandonar la casa’. ¿Por qué este asistente no agregó al acta que el supuesto vomito con sangre, que según él, vio que la nena tuvo?”, arremetió.
Lamentó que ya recurrieron a todas las instancias, y que poseen todos los documentos de la denuncia, además un texto en el que el padrastro fue denunciado y citado por violencia doméstica, pero que el mismo no se presentó.
El hombre indicó que el lunes pasado nuevamente fueron a la Fiscalía y al Poder Judicial. “Nadie nos da una respuesta, pedimos que algún profesional, psicólogo o médico vaya a esa casa y a solas hable con la nena sobre todo lo que pasa, ya que es necesario suponer que esta gente bajo alguna artimaña la presione para que diga que no quiere salir de ahí, ya que eso es lo que manifiestan los vecinos”, añadió.
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