Las empleadas del hospital de Villarrica deben lavar a mano por culpa del precario funcionamiento del lavarropas. Foto: Francisco Benítez.
Según una denuncia de Francisco Benítez, en el mes de abril se quedaron sin uno de los lavarropas con centrifugado, luego de que fuera trasladado como "préstamo" al Hospital Nacional de Itauguá.
Los empleados exigen que se explique la razón por la cual realizaron este procedimiento ya que, según denuncian, el aparato fue comprado gracias a una recaudación colectiva de G. 10 millones.
"Realmente se dejó un aparato en total precariedad, que expone peligrosamente a las compañeras de trabajo que están en el mencionado servicio", refirió Benítez en contacto con Última Hora.
"Un informe del propio jefe de patrimonio de la Cuarta Región Sanitaria, Walter Barrios, menciona que el mismo ministro de Salud autorizó que sea retirado el aparato para el hospital de Itauguá", añadió.
El ex director, Vicente Giret, manifestó que antes de ser destituido no tuvo conocimiento de que se llevaría el equipo hasta Itauguá. "Él dijo que yo sí recibí una orden del ministro para que se entregue el lavarropas", arguyó. Y explicó que actualmente el servicio de lavandería "no da abasto".
"El lavarropas anterior centrifugaba y sacaba la ropa seca, pero ahora se debe lavar a mano y dejar que se sequen en los alambrados", comentó el galeno. Destacó además que por día se realizan de 12 a 14 cirugías, por lo cual se exige la utilización de equipamiento apto para agilizar los servicios.
UH
Los empleados exigen que se explique la razón por la cual realizaron este procedimiento ya que, según denuncian, el aparato fue comprado gracias a una recaudación colectiva de G. 10 millones.
"Realmente se dejó un aparato en total precariedad, que expone peligrosamente a las compañeras de trabajo que están en el mencionado servicio", refirió Benítez en contacto con Última Hora.
"Un informe del propio jefe de patrimonio de la Cuarta Región Sanitaria, Walter Barrios, menciona que el mismo ministro de Salud autorizó que sea retirado el aparato para el hospital de Itauguá", añadió.
El ex director, Vicente Giret, manifestó que antes de ser destituido no tuvo conocimiento de que se llevaría el equipo hasta Itauguá. "Él dijo que yo sí recibí una orden del ministro para que se entregue el lavarropas", arguyó. Y explicó que actualmente el servicio de lavandería "no da abasto".
"El lavarropas anterior centrifugaba y sacaba la ropa seca, pero ahora se debe lavar a mano y dejar que se sequen en los alambrados", comentó el galeno. Destacó además que por día se realizan de 12 a 14 cirugías, por lo cual se exige la utilización de equipamiento apto para agilizar los servicios.
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