Las condenadas son Romina Rolón y Andrea Rosario Romero Lanzoni, a 7 años de cárcel, y Mauricio Rolón y Cepriano Villagra, a 6, todos por venta de drogas. La fiscala María José Pérez Giamperi fue quien presentó la acusación.
El caso se inició el 16 de enero de 2014 en el barrio Naranjaty, de San Antonio, cuando agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) allanaron una vivienda en la que residían las cuatro personas hoy condenadas. En el lugar se encontraron drogas y varios teléfonos celulares.
Esos teléfonos fueron analizados por peritos del laboratorio forense del Ministerio Público y se pudo extraer conversaciones vía Whatsapp en que se comprobó cómo se hacía la venta de drogas en la zona y que la casa era utilizada como una “boca de fumo”, o sea, era usada por los adictos para acudir a drogarse. Con todas estas pruebas, la fiscala Pérez Giamperi presentó acusación contra las cuatro personas y pidió la condena para todas.
Abc
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