Otras ovejas fueron apiladas en una esquina del establecimiento. Foto: Raúl Cortese.
Raúl Cortese | Encarnación
Armando Stark, encargado del establecimiento Aramí, a unos 7 kilómetros y medio del casco urbano de Encarnación, manifestó que cerca de las 00.00 del domingo realizó la última ronda antes de acostarse y a las 06.00 se encontró con las ovejas muertas.
La mayoría presentó heridas en la yugular y en los muslos, mientras que otras tenían las piernas quebradas. Además, no se encontraron rastros de sangre en el lugar pero, según su versión, a los animales les succionaron la sangre.
"Estaban todas amontonadas en un rincón, como que las iba matando y arrojando en un solo lugar. Las que sobrevivieron (unas 15) presentan heridas profundas y cortantes, como algo hecho con mucho filo. Indiscutiblemente, es algo que tiene mucha fuerza porque algunas ovejas tenían el cuello roto y la pata quebrada", sostuvo Stark.
Lo llamativo para el encargado es que tiene 10 perros en el predio, pero ninguno alertó sobre la presencia de un extraño.
El suboficial Carlos Flores informó que encontraron algunas huellas de algo grande y pesado, que quedaron en el barro. Las demás huellas las borró la lluvia registrada durante el fin de semana, por lo que los investigadores están desconcertados.
Otro vecino de la zona, que prefirió no identificarse, señaló que noches atrás a una de sus ovejas le ocurrió lo mismo, pero no le dio mucha importancia. La Policía continúa en la zona, e ingresarían a la zona de montes para poder buscar algún rastro.
UH
No hay comentarios:
Publicar un comentario