En una inexplicable decisión, M. M. M. R. (14) terminó con su vida en la vivienda de su abuela paterna. Según informes de la Policía, la chica había encontrado un revólver calibre 38 que pertenecería a la dueña de casa en el interior de un termo y fue así como tomó la peor decisión. Antes de cometer su autoeliminación, la misma escribió cuatro cartas y asi se despidio de sus días.
M. M., de padres separados, había sido llevada por su madre María R. alrededor de las 15:00 a la casa donde vive su padre, el empresario Walter Miltos O., ubicada en la Zona Norte de Fernando de la Mora, donde se encontraba la empleada, quien alrededor de las 16:45 escuchó un ruido extraño en la planta alta de la vivienda.
La empleada acudió rápidamente al segundo piso y al llegar encontró a la niña ensagrentada, dando aviso al padre, quien la trasladó hasta el Sanatorio Metropolitano, donde finalmente perdió la vida. Las cartas y el revólver fueron entregados a la Fiscalía para su peritaje correspondiente.
CIUDAD DEL ESTE
Otro caso de suicidio que repercutió fuertemente a nivel país fue el ocurrido en la pasada semana en que dos jovencitas esteñas decidieron arrojarse del Puente de la Amistad. Hasta el momento, los cuerpos de las mismas no fueron hallados.
OTRO CASO
Otro caso de suicidio juvenil se dio en Lote Guazú, de San Lo, donde el hijo del conocido periodista de tevé, Silvio Cuevas, tomó la misma determinación aparentemente sin razón alguna.
Pasado el mediodía, L. C. (15) terminó con su vida colgándose con una piola en el techo de su habitación.
Según informes policiales, tan solo 15 minutos antes del hecho la madre de L. C. se había comunicado con él vía celular, cuando la misma llegó a la casa bocinó al joven y tras no tener respuesta ingresó por la muralla del vecino.
Cuando llegó al dormitorio del péndex se encontró la inesperada sorpresa. El joven fue trasladado hasta el Sanatorio Metropolitano, donde se confirmó su deceso. Capetos de la Fiscalía incautaron el celular del quinceañero para peritaje del mismo.
SEÑALES
Especialistas sobre el tema de los suicidios en la “crítica” etapa de la adolescencia dicen que hay que estar atentos a los que hacen los chicos, ya que pueden notarse las ideas suicidas con los cambios de actitud de ellos.
Los jóvenes desmotivados pasan mucho tiempo alejados de la gente, encerrados en su pieza o empiezan a desinteresarse por lo que respecta a las obligaciones colegiales o su aspecto corporal. Otro síntoma es la idea de que todo es “negro”, comentarios acerca de que nada luego es bueno y que la vida no tiene ningún sentido.
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