El rodado del gobierno departamental estaba al mando de un funcionario de dicha institución quien dió positivo 1,01 a la prueba de alcotest. El hecho ocurrió a las 11:30 aproximadamente en el ramal que une Paraguarí- Villarrica. El gobernador de Paraguarí, Miguel Cuevas (ANR) ya ordenó que se instruya sumario para deslindar responsabilidades y determinar quién autorizó el uso del vehículo.
El accidente no dejó como resultado heridos graves. El funcionario departamental Richard Daniel Fretes (22), residente de Sapucai, quien sufrió lesiones en brazos y piernas y fue derivado al Hospital Regional de Paraguarí para su mejor atención.
Fretes iba al mando de la camioneta marca Isuzu con chapa BEZ 127, color negro. Según el parte policial, la camioneta Isuzu es propiedad del hermano del gobernador Cirilo Cuevas.
Sin embargo, el gobernador Cuevas aseguró que la camioneta pertenece a la administración departamental, por lo que ya ordenó al secretario General de la institución, Abog. Luis María Cáceres, que instruya sumario para que se aclare quién autorizó el usufructo de la camioneta y las condiciones.
El otro vehículo involucrado en el percance es un Volkswagen, tipo Bento, color plateado con chapa BEJ 321, guiado por Pedro Javier Giméntez Britez, quien iba en compañía de su esposa Claudia Susana Crosa Rivarola y su pequeña hija de dos años.
De acuerdo a los testigos, el auto de la familia quedó en el semáforo y le habilitó para girar hacia la izquierda y de hacia atrás les alcanzó la camioneta que se desplazaba a gran velocidad, chocó y tras el impacto embistió contra una columna del alumbrado público lo que le provocó el aparatoso vuelco del rodado de la Gobernación de Paraguarí.
Como en la comisaría local no contaban con el alcolímetro, se recurrió a la Patrulla Caminera de Carapeguá, cuyos agentes ayudaron para la toma de alcostest que arrojó positivo para el funcionario departamental.
La familia afectada se dirigía con destino a la ciudad de Sapucai, para disfrutar un acontecimiento familiar, pero tras la desgracia con suerte quedaron a aguardar por más de cinco horas para asegurar que le tomen la prueba de alcotest al funcionario departamental y luego llegó una grúa que lo trasladen hasta la capital del país.
Abc
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