En la madrugada del sábado se llevó a cabo un control de alcotest sobre la avenida Aviadores del Chaco de Asunción, en el que la joven Anahí Servín, dio positivo a la prueba con un nivel de 1,8 miligramos.
Como consecuencia, los agentes de la Caminera le advirtieron que su vehículo sería derivado al corralón municipal.
“Ellos directamente me dijeron que me iban a quitar el auto, ni siquiera me ofrecieron pagar una multa, entonces me puse muy nerviosa y en señal de protesta me quité la ropa y le dije: tomá, mirá bien ya esto, pero aclaro que no soy de las que anda desnuda en el auto”, expresó Servín en charla con Radio UNO.
Reconoció que no midió sus actos pero cuestionó que la Patrulla Caminera haya filmado el procedimiento y que lo haya viralizado en las redes sociales por puro morbo.
“La consecuencia moral de lo que ellos hicieron es muy grande, ¿por qué tuvieron que mostrarle a todo el mundo el video?”, aseveró.
Alegó que desconoce las reglas de tránsito y admitió que aquella noche bebió mucho alcohol. Sin embargo, sostuvo que eso no le da el derecho a la Policía de arrebatarle el auto.
“Es algo que me costó muy caro para que ellos vengan a a quitarme de onda nomás, estuve dos horas ahí atrapada”, afirmó.
Contó que finalmente le permitieron pagar una multa para liberarla a ella y su rodado. Además, le exigieron que algún responsable pase a buscarla.
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