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sábado, 7 de febrero de 2015

Niña necesita un corazón

SAN LORENZO. Una niña de 11 años requiere con urgencia una donación de corazón.

“La prioridad no es 1 sino 0 a estas alturas. Hace un año que espera”, resaltó la Dra. Nancy Garay, jefa del Departamento de Cardiología del Hospital Acosta Ñu.

La paciente padece de cardiopatía restrictiva y está internada en situación crítica en la Terapia Cardiovascular del referido Hospital General Pediátrico. Garay informó que la pequeña está con asistencia de drogas vasoactivas que la mantienen estable, pero no pueden garantizar cuánto tiempo más pueda resistir.

La niña necesita con urgencia de un donante de entre 25 a 60 kilos, con grupo sanguíneo del grupo 0 RH (+) o A (+). En el último se internó cada semana, y actualmente decidieron dejarla internada por el desmejoramiento de su salud, lo que ya no le permite volver a su casa.

La cardióloga señaló que desde el miércoles están en constante comunicación con profesionales del Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT), y que cambiaron el estatus de la paciente a “prioridad 0”.

“Estamos atentos a la llamada, de haber un donante”, dijo.

Instó a la población a que tome conciencia sobre la necesidad de donar órganos cuando su paciente tiene muerte cerebral, ya determinado por una junta médica. Dijo que dicho estado es irreversible, y al llegar a muerte cerebral en poco tiempo van muriendo los órganos.
ORDEN JUDICIAL

Por otro lado la doctora Garay lamentó que la justicia, sin consulta previa a los profesionales de la salud, por orden judicial, tenga que ordenar que niños tengan que ser operados. Se refirió al caso de una paciente de siete días de edad, procedente de Hernandarias (Departamento de Alto Paraná), para que la intervengan de manera urgente.

La pequeña es portadora de una cardiopatía congénita de trasposición de grandes arterias, que si bien es una anomalía gravísima y necesita tratamiento de urgencia, existen otros niños internados a la espera de su cirugía, que también son de urgencia. Señaló que los fiscales y jueces no pueden proceder tan alegremente, sin previa consulta con los profesionales, verificando la posibilidad en otros hospitales.

Señaló que la decisión judicial lo que hace es desorganizar el Servicio de Cardiología, y alterar una lista preestablecida de pacientes en lista de espera. “Estamos pensando como nosotros le vamos a decir a los padres de un niño que también requiere de una cirugía de urgencia que el lugar, por el cual esperó, va a ser usufructuado por otra paciente, por orden de la justicia”.

“Molesta que sin previa comunicación de la fiscalía a los profesionales, para saber de nuestra posibilidad de poder operarle de urgencia, que nos envíe el paciente para resolver la situación. Hay pacientes con fecha marcada esperando meses y con insumos cardiológicos donados por fundaciones y ahora parar todo eso para poder resolver la orden judicial”, insistió.

Abc

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