El hecho ocurrió en horas de la mañana de este sábado en el restaurante Ña Eustaquia del centro, ubicado sobre calle Palma, según denunció Jazmín Troche a través de su cuenta de Facebook.
Troche manifestó que vieron pasar a tres niños indígenas a quienes invitaron a beber un smoothie en su mesa, a lo que los menores acudieron "llenos de alegría e inocencia", admitió la joven.
Sin embargo, al rato, un guardia de seguridad se les acercó y les solicitó que se retiraran del lugar ya que no podían permanecer allí por su compañía "ya que en ese lugar solo se acepta gente pudiente", expresó en la red social la denunciante.
"Con mi amiga solo queríamos darle una alegría a esos pequeños, que por su condición de indígena de por sí en nuestro país ya son discriminados. No queremos perjudicar a los empleados, en este caso al guardia que en un principio fue muy amable, entiendo que el solo recibe órdenes", expresó la clienta a la prensa.
Troche aclaró que no pretende polemizar el caso pero que la empresa debe comprender que eso es discriminación. "Esas políticas empresariales me parecen totalmente absurdas y deshumanizadas", agregó.
Finalmente, los empleados del local ofrecieron colocar las bebidas en un vaso de plástico para que salgan lo antes posible "A lo cual obviamente nos negamos y no nos movimos de la mesa, los niños ni se percataron, seguían compartiendo entre los tres la bebida", dijo la joven.
Jazmín y su amiga finalmente decidieron abandonar el local cuando comenzaron a sentir molestas por la presencia del guardia frente a la mesa en la que estaban sentadas. "Al final pedimos el vaso y nos retiramos", aseveró.
Desde el diario recibimos una respuesta de la firma a través de su cuenta oficial en Facebook, por medio de la cual aseguraron estar al tanto de lo ocurrido y que verificarán las imágenes del circuito cerrado, para luego tomar las medidas correspondientes en caso de que fuere necesario.
UH
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