El hecho ocurrió cerca de las 11:40 de ayer lunes en plena avenida Artigas, según se observa en las imágenes. El ladrón abordó el bus y estando aún en la estribera empezó a sacar prendas de vestir de una mochila, como si buscara algo. El chofer lo observó esperando a que termine de subir para poder reanudar su marcha.
En un momento, el delincuente volvió a meter sus pertenencias y se alcanzó a ver que solo quedó una pistola en su mano. Cuando subió al bus, mostró el arma a los pasajeros y estos reaccionaron sorprendidos.
Como las imágenes son mudas, no se alcanza a escuchar la conversación pero se supone, a juzgar por las reacciones, que el joven intimó a los que iban a bordo de la unidad a entregarles sus pertenencias de valor.
Mientras los pasajeros buscaban en sus bolsos el que iba a ser el botín, el ladrón mostró su mochila para que depositen allí las pertenencias. Del total de viajantes, cuatro resultaron víctimas del malhechor a quien se observa cómo cargaba los objetos que iba robando.
Tras cometer el hecho, cerró su mochila, la cargó y pidió al chofer que para el bus para que pudiera bajar. El chico descendió, hizo un gesto de “al pelo” al conductor y continuó su marcha.
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