Julio Fernández Muller, que fue presuntamente quien chocó el auto de Scappini y la maniató y llevó secuestrada, declara este lunes ante el Tribunal de Sentencia que juzga el caso. Al iniciar su declaración, pidió perdón a sus padres por lo que hizo, ya que, según dijo, esos no fueron los valores que ellos le enseñaron para la vida.
Asimismo, pidió perdón a su esposa y a sus hijos, que ahora son “el hazmerreír de la gente” por causa de él. También pidió perdón a la víctima y a su familia, especialmente a la madre, porque -dijo- el dolor de una madre no tiene precio. “Pido perdón a mi familia, a mis padres, que me enseñaron otra cosa, los valores de la vida. A mi esposa y a mis hijos, que son el hazmerreír de la gente”, refirió durante el juicio.
Fernández, quien está recluido desde hace tres años, es uno de los procesados por el secuestro de la empresaria Dalia Scappini, ocurrido en Asunción el 30 de agosto de 2011 cuando ella se dirigía a su trabajo. Su declaración continuará durante toda la mañana para responder a las preguntas de las partes.
Abc
Asimismo, pidió perdón a su esposa y a sus hijos, que ahora son “el hazmerreír de la gente” por causa de él. También pidió perdón a la víctima y a su familia, especialmente a la madre, porque -dijo- el dolor de una madre no tiene precio. “Pido perdón a mi familia, a mis padres, que me enseñaron otra cosa, los valores de la vida. A mi esposa y a mis hijos, que son el hazmerreír de la gente”, refirió durante el juicio.
Fernández, quien está recluido desde hace tres años, es uno de los procesados por el secuestro de la empresaria Dalia Scappini, ocurrido en Asunción el 30 de agosto de 2011 cuando ella se dirigía a su trabajo. Su declaración continuará durante toda la mañana para responder a las preguntas de las partes.
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