La facción del grupo criminal Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) que lideran los hermanos Jara Larrea, en plena formación.
En contacto con Canal 100, Rojas mencionó que luego de los últimos operativos en el Norte pudo reconfirmar los nexos entre los asesinos nucleados en la banda autodenominada EPP y el narcotráfico en Concepción y San Pedro. Indicó que al menos el sector dirigido por los hermanos Jara Larrea está fuertemente ligado al cultivo de marihuana. “Estamos preparando un informe sobre eso al Ministerio Público; al menos esa columna -los Jara Larrea- está en ese tema”, refirió.
Se trata del ala que anteriormente estaba con el primer anillo del EPP, pero luego se desprendió aparentemente debido a conflictos de liderazgo. De esta manera, un grupo dirigido por los hermanos Albino Ramón Jara Larrea y Alfredo Jara Larrea integró una nueva célula que pasó a llamarse Asociación Campesina Armada (ACA).
Rojas aseguró incluso que justamente gracias al narcotráfico los criminales obtienen armas de todo tipo. “El narcotráfico los estaría equipando con armas; esta es una fuente de financiamiento”, refirió.
Aparentemente, los secuestradores estarían cobrando “un impuesto revolucionario” similar al aplicado por las FARC, de Colombia. Advirtió que si continúa este flagelo, el EPP pasará a vender 'protección' y luego ya se ingresará de lleno al negocio del narcotráfico. Para el titular de la Senad, todo esto es prueba de que “están lejos los ideales revolucionarios que esgrime esta gente”.
Abc
Se trata del ala que anteriormente estaba con el primer anillo del EPP, pero luego se desprendió aparentemente debido a conflictos de liderazgo. De esta manera, un grupo dirigido por los hermanos Albino Ramón Jara Larrea y Alfredo Jara Larrea integró una nueva célula que pasó a llamarse Asociación Campesina Armada (ACA).
Rojas aseguró incluso que justamente gracias al narcotráfico los criminales obtienen armas de todo tipo. “El narcotráfico los estaría equipando con armas; esta es una fuente de financiamiento”, refirió.
Aparentemente, los secuestradores estarían cobrando “un impuesto revolucionario” similar al aplicado por las FARC, de Colombia. Advirtió que si continúa este flagelo, el EPP pasará a vender 'protección' y luego ya se ingresará de lleno al negocio del narcotráfico. Para el titular de la Senad, todo esto es prueba de que “están lejos los ideales revolucionarios que esgrime esta gente”.
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