Un agente de Criminalística toma muestras de una de las ocupantes de la casa donde ocurrió el hecho.
El fallecimiento de la joven Nayive Janette Otto Arnold (19) fue confirmado por familiares a primera hora de hoy. Ocurrió en el Hospital de Calle’i San Lorenzo, donde fue asistida de urgencia tras el disparo.
Otto Arnold, estudiante de veterinaria y bombera voluntaria, vivía con su familia en el barrio Posta Ybycuá de Capiatá. Según datos policiales, la joven despertó alrededor de la medianoche y fue hasta la cocina con la intención de beber agua, cuando Ana María Arnold Otto, su madre, desde su habitación escuchó ruidos y se puso en alerta.
La madre confesó entre llantos que tomó su arma de fuego y primero se asomó sigilosamente a la pieza de su hija y le pareció ver que aún estaba acostada, confundiéndola con frazadas y sábanas. Entonces, armada con un revólver calibre 38, fue a oscuras hasta la cocina y al ver una silueta efectuó un disparo contra lo que pensó era un desconocido, pero luego escuchó que una voz le decía: “¡Mamá! ¡Qué hiciste!”.
La joven cayó gravemente herida, ya que el proyectil ingresó por el abdomen y la atravesó hasta salir por la espalda. Fue rápidamente trasladada al hospital, donde agonizó unos pocos minutos.
Minutos después se hicieron presentes en la residencia agentes de la comisaría local y de Criminalística, quienes levantaron evidencias de la escena. La madre permanece detenida en la comisaría local. Según los familiares, la familia estaba armada debido a que ya fueron asaltados en su propia casa en reiteradas ocasiones.
Abc
Otto Arnold, estudiante de veterinaria y bombera voluntaria, vivía con su familia en el barrio Posta Ybycuá de Capiatá. Según datos policiales, la joven despertó alrededor de la medianoche y fue hasta la cocina con la intención de beber agua, cuando Ana María Arnold Otto, su madre, desde su habitación escuchó ruidos y se puso en alerta.
La madre confesó entre llantos que tomó su arma de fuego y primero se asomó sigilosamente a la pieza de su hija y le pareció ver que aún estaba acostada, confundiéndola con frazadas y sábanas. Entonces, armada con un revólver calibre 38, fue a oscuras hasta la cocina y al ver una silueta efectuó un disparo contra lo que pensó era un desconocido, pero luego escuchó que una voz le decía: “¡Mamá! ¡Qué hiciste!”.
La joven cayó gravemente herida, ya que el proyectil ingresó por el abdomen y la atravesó hasta salir por la espalda. Fue rápidamente trasladada al hospital, donde agonizó unos pocos minutos.
Minutos después se hicieron presentes en la residencia agentes de la comisaría local y de Criminalística, quienes levantaron evidencias de la escena. La madre permanece detenida en la comisaría local. Según los familiares, la familia estaba armada debido a que ya fueron asaltados en su propia casa en reiteradas ocasiones.
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