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lunes, 20 de enero de 2014

Se enfrentó a asaltantes pero terminó procesado

Un distribuidor de la empresa Cervecería Paraguaya SA (Cervepar) quedó ligado a un proceso penal al ser imputado luego de que se enfrentara a tiros con dos “motochorros”, los redujera y recuperara el dinero que le habían robado.

El brasileño Pedro Pablo Canto y el paraguayo Andrés Arturo Benítez Velázquez aparecen esposados y custodiados tras ser reducidos por el distribuidor de Cervepar.

El tiroteo se registró el 11 de enero pasado alrededor de las 06:00 sobre la avenida José Berges casi 1º de Mayo del barrio María Victoria de Pedro Juan Caballero.

Según el informe de la Jefatura de Policía de Amambay, el distribuidor de Cervepar SA, Estanislao Valiente Alfonso (32), fue interceptado cuando se desplazaba a bordo de un furgón de la marca Chana.

Los dos delincuentes, que actuaron en una motocicleta Honda Titán, le robaron G. 5 millones en efectivo y cheques por un monto similar, además de su celular y otros objetos.

Tras el ilícito, la víctima persiguió a los dos criminales en un intento por recuperar su dinero.

En medio de la persecución, uno de los delincuentes, Andrés Arturo Benítez Velázquez (20), comenzó a disparar contra el distribuidor de Cervepar SA con un revólver calibre 38. Su cómplice, el brasileño Pedro Pablo Canto (33), estaba al mando del biciclo.

La víctima del robo arrolló a los dos “motochorros”, aunque Andrés Arturo Benítez volvió a disparar desde el suelo contra el distribuidor, quien repelió la acción con un revólver que tenía dentro de su vehículo.

Finalmente, los criminales fueron reducidos y el botín recuperado por la misma víctima.

Benítez Velázquez acusó un tiro de refilón en el abdomen. El criminal herido ya había sido detenido dos meses antes por un asalto en Pedro Juan Caballero, pero nuevamente estaba libre gracias a una sugestiva decisión de la Justicia.
PRESO, IMPUTADO Y DESPUÉS LIBERADO

Tras este episodio, intervino en el caso la fiscala Dionisia Camila Rojas.

El distribuidor Estanislao Valiente Alfonso pasó más de 24 horas preso hasta que fue liberado.

Sin embargo, el fiscal Juan Carlos Blanco Ramírez tomó el proceso y lo imputó por tenencia ilegal de armas, al juzgar el hecho de que la víctima tenía consigo un revólver, según los datos suministrados por los investigadores.

TENTATIVA DE HOMICIDIO

En principio, se manejó la posibilidad de que Alfonso sería procesado por tentativa de homicidio, ya que disparó contra los asaltantes, aunque luego de que estos lo atacaran a balazos, con lo que la víctima iba a pasar a ser el victimario. Pero después las fuentes de la Fiscalía confirmaron que el distribuidor quedó ligado a un proceso por tenencia ilegal de armas y, de momento, afrontará el caso en libertad.

FuenteAbc

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